La transformación digital es un fenómeno que afecta por igual a todos los sectores de la economía. Ni los laboratorios de prótesis dental ni el resto de los agentes implicados en la odontología estética y restauradora son ajenos a este fenómeno.
En pocas palabras: el laboratorio de prótesis dental que no se digitalice, desaparecerá más pronto que tarde. Por el contrario, el que llegue antes tendrá una ventaja competitiva muy valiosa. Y los laboratorios asociados al Club Tecnológico Dental, pioneros en la implantación de las más modernas tecnologías, pueden ser de gran ayuda para las clínicas que decidan subirse al tren del flujo digital.
Cuando se habla sobre transformación digital o digitalización, a muchos les viene a la cabeza la misma idea: “Bueno, yo ya tengo una web y perfiles en las redes sociales que me interesan”. Pero este concepto tan general alude a muchos más factores, que varían de unos sectores a otros y no dejan de evolucionar.
En el mundo de la odontología, por ejemplo: se podría hablar de consultas online, gestión de pedidos a proveedores mediante dispositivos digitales y una atención al cliente allí donde esté: teléfono, chat, correo electrónico.
Tecnología clínica digital
La digitalización también alcanza a la tecnología con la que se atiende y trata a estos pacientes. Si echamos la vista atrás, no hace tanto tiempo era impensable que pudiéramos hablar con alguien al otro lado del mundo con una calidad de imagen y sonido más o menos buena. Hoy es algo natural para nosotros.
De la misma forma, en odontología no esperábamos que se implantara una tecnología que hoy permite que a un paciente se le pueda hacer una toma de impresión sin material de impresión, un registro de mordida sin cera o el diseño de una restauración protésica sin ceras, escayolas ni ninguno de los materiales que venimos utilizando de manera convencional. Y enviar los datos al laboratorio con la rapidez y la comodidad que aporta la fibra óptica.
Es lo que se denomina el flujo digital, ese revolucionario proceso que hoy en día ya permite tomar impresiones digitales con un escáner intraoral, enviar el archivo al laboratorio a través de internet y compartir con él un trabajo común de diseño de la prótesis dental. Este sistema, además de acelerar y agilizar los procesos de entrega, garantiza la producción de prótesis con un alto grado de precisión y posterior ajuste que resulta incluso asombroso gracias a las tecnologías CAD-CAM.
El papel de los laboratorios de prótesis dental
Esta tecnología ya lleva tiempo en el mercado y sigue evolucionando. En este proceso hay que destacar el papel de los laboratorios de prótesis dental, más ágiles que las clínicas a la hora de implantar el flujo digital en su sistema de trabajo. Desde hace ya unos años, por ejemplo, es posible empezar y terminar una corona de Zr monolítico, ya sea sobre dientes tallados o sobre implantes, sin necesidad de trabajar con modelos físicos en todo el proceso.
Gracias a esta tecnología, se gana tiempo en el tratamiento del paciente y se mejora su nivel de satisfacción, dos factores fundamentales para las clínicas de hoy, que trabajan en entornos muy competitivos. En la actualidad, en una sola visita se pueden obtener capturas intraorales del paciente para confeccionar estos tratamientos en el laboratorio con los mejores resultados estéticos y funcionales que se pueden encontrar en el mercado.
A la vanguardia del sector
Los laboratorios que pertenecen al Club Tecnológico Dental fueron de los primeros que intuyeron que el flujo digital iba a cambiar no sólo la manera de trabajar, sino de entender la odontología y sus procesos. Por eso no dudaron en ponerse en contacto con las principales industrias que ofrecían aquellas primeras máquinas con el objetivo de colocarse a la vanguardia del sector tecnológico. Aquella visión los ha convertido en laboratorios altamente cualificados en la gestión y procesado de todo tipo de prótesis dentales CAD-CAM.
Estar entre los pioneros nos ha permitido formarnos e invertir en las últimas novedades del sector para, de esta forma, realizar restauraciones estéticas con técnicas que antes eran impensables. Por ejemplo, podemos realizar una corona estética de zirconio monolítico sobre un implante en cuatro días sin ningún problema y con unos resultados excelentes. Todo ello gracias a varias mejoras tecnológicas:
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Unos zirconios de última generación que combinan alta translucidez y una resistencia y dureza más cercana a la del diente natural.
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Unos maquillajes que permiten personalizar colores y matices de manera casi infinita.
- Los elementos de transmisión (scan bodies) y conexión a los implantes (interfases de titanio nitrurado) de los que disponemos.
Curva de aprendizaje
Todo esto no habría sido posible si desde las clínicas dentales no hubiera habido otros visionarios que supieron ver las ventajas de esta tecnología y acompañaron a los laboratorios en esta apuesta por el CAD-CAM. Una apuesta que podía salir bien o mal, como ocurre con cualquier novedad que llega al mercado, y con las complicaciones que conlleva esa famosa curva de aprendizaje por la tuvieron que pasar también ellos en su momento.
Actualmente hay ya un número inmenso de laboratorios y, creciente de clínicas dentales que están por fin apostando por seguir el flujo digital. Los laboratorios del Club Tecnológico Dental pueden ser de gran ayuda para esas clínicas que necesitan a profesionales con experiencia que los guíen para conseguir unos resultados óptimos. Con nuestra contribución, podemos hacerles más fácil la entrada en este mundo que, aunque parece igual, tiene grandes diferencias conceptuales que no se deben obviar si se pretende implantar este método de trabajo en la clínica dental.